Cosas que te pasan cuando andas sin gafas
Les cuento que se me rompieron las gafas hace poco, y yo las necesito para todo.
Durante esos días de ceguera, me pasó de todo:
Primero, no entendía absolutamente nada en las clases, era como si no hubiese ido.
Ver películas o TV era un martirio.
No solo terminaba con un dolor de cabeza terrible, por forzar la vista, sino que ni sabía qué estaba viendo.
Empecé a golpearme con las cosas.
El colmo fue cuando no pude reconocer a la gente en la calle.
Creian que no los queria saludar. Realmente no podía diferenciarlos.
Tenía que hacer algo urgente. Fue ahí cuando busqué ópticas en google y descubrí Centrilen.
Para mi, fue una bendición conocer esta Óptica! Me atendieron de una forma cercana y profesional.
Me gusta lo “vintage” y pude encontrar facilmente lentes de ese estilo.
En unos días me entregaron las gafas, y así fue como volví a la normalidad.
Sobre todo, porque amo leer.